Restyling en apartamento
Cuando recibimos a E. y J. en nuestro estudio el mensaje fue claro; necesitaban hacer un restyling al apartamento que tantos veranos les había visto pasar. Querían seguir haciéndolo de un modo más intenso si cabe.
Aunque ya lo sentían casa por el vínculo familiar que había con la vivienda y su historia, sentían que era el momento de hacerlo más confortable y, de alguna manera, actualizarlo a la familia que evolucionaba. Para todo esto había una premisa importante: no hacer obras a no ser que fuese estrictamente necesario.
Para comenzar con este proyecto tuvimos que poner sobre la mesa aquellas características de la vivienda con las que teníamos que jugar: un pavimento general de la casa que no se iba a cambiar, tres distribuidores que tendían a oscurecer los espacios, una cocina muy bien cuidada pero estéticamente desactualizada y 5 dormitorios que, en la medida de lo posible, se iban a mantener sus muebles e iluminación.
En el salón comedor se enmarcaron las dos zonas con alfombras, nos ayudaban a delimitar los espacios y disimular el suelo original. En la zona de sofás usamos una de cuerda como base con la intención de cubrir suelo y un kilim decorativo encima creando un espacio muy acogedor.
La zona de comedor, presidida por una preciosa lámpara de cuerda y flecos, está envuelta por un revestimiento de papel de sisal teñido en un azul plomo haciendo un guiño al cuadro que apoya sobre el aparador de madera maciza. El cuadro ya pertenecía a la vivienda y nos gustaba la idea de que siguiera en ella.
La elección de textiles para caídas y estores estaba clara, apostamos por tejidos amables, linos, colores claros y lisos o estampados coordinados que acompañasen al resto de decoración, mobiliario, resto de textiles, cuadros, etc.
Algunos detalles de la vivienda de los que no queríamos desprendernos. Seda pintada a mano con enmarcación original y mueble bar con fondo empapelado e iluminación interior.
En la cocina optamos por sustituir la encimera, aprovechando la ocasión para hacer una ampliación que sirviera de mesa alta para desayunos o aperitivos de diario. También cambiamos los tiradores, de cromo a negro y añadimos un módulo nuevo totalmente distinto, de madera de paulownia. El nuevo rincón hacía funciones de zona de café, almacenamiento y zona de electrodomésticos. Junto al papel y la decoración se convierte en una de los puntos más atractivos de la cocina.
Tanto en cocina como en algunos dormitorios y baños se incluyeron láminas y fotografías que aportaban un aire más divertido y con matices un tanto sofisticados.
La vivienda cuenta con dos distribuidores que conducen a los dormitorios y baños, haciendo un juego simétrico y no quisimos desaprovechar la oportunidad de unificar los espacios empapelando el techo con rafia natural y eligiendo papeles pintados coordinados.
Para el restyling de este baño se sustituyó la bañera por ducha y se cambió el mueble de baño. Como el original apoyaba en suelo y se dañaba el pavimento al retirarlo, optamos por completarlo con un diseño estilo hidráulico que conformara una alfombra. También empapelamos con papel vinílico sobre el azulejo de pared y le dimos el máximo protagonismo al techo.
Como guiño a lo que había sido ese baño hasta entonces (el baño verde) guardamos uno de los azulejos de pared que teníamos en la zona de bañera y lo enmarcamos, sirviendo como decoración del propio baño.
Manteniendo el estilo del resto de vivienda se optó por, además del techo, empapelar los dormitorios con papeles que enlazan entre si las estancias, mantener parte del mobiliario y confeccionar los estores con tejidos naturales.
Al final, es una vivienda dedicada a la desconexión y sin grandes necesidades además del descanso y el disfrutar de tiempo en familia.
En el baño y dormitorio principal, una vez más, se encontró en el papel pintado el gran aliado para darle un cambio total y ofrecer a las personas que lo habitan ese espacio que desprende paz por todos lados, un lugar de intimidad y tranquilidad. Y aunque en la vivienda en general se viva con ese espíritu, es cierto que pasar la puerta que separa este dormitorio con baño del resto de la casa es como entrar en un pequeño oasis.
En ese baño fue el único lugar donde tuvimos que hacer cambio de pavimento y retiramos un tabique, por lo demás seguimos empapelando y reutilizando algunos accesorios que nos parecía que tenían muchísima fuerza y contrastaban genial con ese aire más soft que habíamos instaurado.
Una de nuestras partes favoritas del proyecto ha sido tener la libertad total para crear piezas enmarcadas, combinando maderas, tejidos, ilustraciones, fotografías y papeles.
Imaginar piezas exclusivamente para un espacio y unas personas que siempre aceptan con los brazos abiertos.
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