Al calor de los fogones creamos ésta vivienda en la que hemos aprendido la máxima de que, menos es más, en cuanto a estilo y elegancia se refiere. Sobrios y exquisitos en gustos, el estilo masculino inunda ésta vivienda de espacios abiertos, materiales nobles, las lacas en color oscuro, ebanistería impecable y textiles de otro mundo, en la que el jardín invade la cocina uniendo visualmente todos los espacios y haciendo de la cocina el centro de todo.












































