En casa
de Ana
Berganza
Ana siente debilidad por los abetos. Traerlo a casa cada año se ha convertido ya en una tradición para toda la familia. Este año el abeto normandie está especialmente bonito, tanto que Ana ha decidido dejarlo así, solo con una estrella en lo alto.
La mesa seguirá el mismo estilo, colores y materiales naturales para celebrar un año que termina y que nos ha llevado a todos a valorar las cosas más sencillas por encima de todo. Madera como bajo platos y tablas de distintas formas para presentar la comida, manteles de lino blanco con vajilla de porcelana blanca y velas, muchas velas.
Una decoración sencilla pero acogedora para celebrar un año que comienza con esperanza. Un año al que recibiremos desde la tranquilidad, con la familia más íntima y desde el disfrute de nuestra casa, que ya es un hogar.
Disfrutad de estos días, bien merecidos para todos, decorad vuestras casas y celebrad siempre.
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